Un mínimo de 74 muertos y varios centenares de heridos fue el resultado del baño de sangre que sacudió el estadio egipcio de Port Saïd durante el encuentro entre el Masri y el Al Ahly de El Cairo. La violenta batalla campal entre aficionados de ambos equipos, rivales, estremeció un país que en estos días está celebrando el primer aniversario de la caída de Hosni Mubarak.
La tragedia se sumó además a la larga leyenda negra que envuelve la historia del fútbol. Quizás el caso más recordado es la ocurrida en el estadio Heysel de Bruselas antes de que empezara la final de la Copa de Europa de 1984/85. Hasta 39 personas fallecieron a causa de una avalancha en la previa del partido que iban a disputar la Juventus y el Liverpool. Los sucesos también causaron 600 heridos. La UEFA sancionó a los equipos ingleses con seis años sin poder participar en competiciones europeas.
El conjunto inglés se vio involucrado en una nueva desgracia solo cuatro años más tarde. El 15 de abril de 1989, en el campo de Hillsborough (Sheffield), 96 personas murieron aplastadas contra las vallas por culpa de una avalancha. Liverpool y Nottingham Forest estaban disputando las semifinales de la FA Cup. El exceso de aficionados en el campo y el hecho de que el estadio no cumplía los requisitos de seguridad provocaron la tragedia.
Los dos grandes sucesos en número de víctimas se registraron, sin embargo, en Moscú y Lima. En 1982, en el estadio Lenin hubo 340 muertos por un alud durante un partido de la Copa de la UEFA entre el Spartak de Moscú y el Haarlem holandés. Se registraron también unos mil heridos.
Casi veinte años antes, en 1964, el estadio Nacional de Lima era el escenario de un partido entre Perú y Argentina correspondiente de la fase de clasificación para los Juegos Olímpicos. Cuando el colegiado anuló un gol al equipo local, se desencadenó unas batalla en las gradas que provocó 301 fallecidos.
La caída de una pared, que dejó 22 muertos y 130 heridos en el estadio Félix Houphouet Boigny de Costa de Marfil, es el antecedente más cercano al de Egipto en la historia de las tragedias en estadios de fútbol. Este episodio ocurrió durante un partido entre el equipo local y Malawi en marzo de 2009.
También en África, concretamente en Ghana en 2001, un enfrentamiento entre aficionados del Accra Hearts y del Kumasi Ashanti causó el pánico entre el público que intentaba escapar de la pelea. Las puertas estaban cerradas y murieron 130 personas.
El mismo año de la tragedia de Heysel se produjo otro grave incidente en Inglaterra durante un partido de Tercera División. Fue en el Valley Parade de Bradford el 11 de mayo de 1985. Un incendio dejó 56 fallecidos y más de 250 personas heridas mientras jugaban el Bradford City contra el Lincoln City.
El 23 de junio de 1968, en el estadio Monumental de River Plate y durante un superclásico con Boca Juniors, murieron 71 personas. Fue la peor tragedia en la historia del fútbol argentino. Tras el partido, los hinchas de Boca se encontraron con la salida bloqueada en la puerta 12 del estadio.
Otro punto negro lo encontramos el 5 de mayo de 1992 en Córcega. En el estadio Furiani de Bastia se desplomó una tribuna provocando 17 muertos y más de 2.000 heridos.